Los niños se cansan y se aburren en los viajes largos en coche. No están acostumbrados a permanecer tanto tiempo sentados y eso puede provocar que se pongan nerviosos, distraigan al conductor, provoquen conflictos con los hermanos, etc. Para evitarlo, Balumba te ofrece una serie de consejos.

Planificar el viaje

Es importante decidir la ruta a seguir, ya que un trayecto con numerosas curvas puede hacer que los niños se mareen y, por otro lado, ir por autopista puede resultar monótono. Una vez decidida la ruta, es bueno explicar a los niños las etapas del viaje, ya que de esta forma sabrán por dónde van y no estarán tan ansiosos por saber cuánto falta para llegar.

Preparar el coche antes de salir

Es muy importante revisar que las sillas infantiles están bien colocadas. Estas deben usarse en todos los viajes, puesto que son vitales para la seguridad de los pequeños. Es buena idea también preparar una bolsa con algo de comida para picar, como frutos secos o galletas, y bebidas, preferentemente agua y zumos. Si los niños son propensos a marearse conviene también tener a mano algún medicamento y tomar algunas precauciones como evitar el consumo de alimentos sólidos antes de salir, conducir con suavidad, ventilar el coche, etc.

Durante el viaje

Para que estén distraídos es bueno que los niños jueguen, oigan historias o música y canten. Otro aspecto a tener en cuenta es hacer frecuentes paradas. Asimismo, es fundamental educar a los niños desde pequeños en la importancia de no distraer al conductor y en que dentro del coche deben seguir unas normas.

Siguiendo estos sencillos consejos harás que viajar con tus hijos sea mucho más seguro y ameno.