¿Una glaciación, un meteorito, el insoportable hecho de que no existiera la tele por cable? Las teorías sobre la extinción de los dinosaurios son varias, pero hay un dinosaurio al que la palabra extinción no le suena (bueno, en realidad no le suena ninguna palabra ¡es un dinosaurio!). Nos referimos al gran, poderoso y corpulento ¡ROBOSAURUS! Robosaurus es una máquina pensada para destruir, achicharrar y devorar coches incautos y desprevenidos que en el momento de ser atacados seguro que piensan “¿qué estoy haciendo aquí solo en esta especie de plaza rodeada de gradas y de gente que grita?”. En fin, no sintamos pena, después de todo ser devorado por el Robosaurus es sin duda un final glorioso digno de una epopeya griega.

En algún lugar de ese país llamado Estados Unidos, EEUU, o mejor, tal y como sugerimos a partir de ahora: “la tierra del Robosaurus”, habita el más poderoso espécimen de La Tierra (con permiso de Chuck Norris claro) ¡Un momento! ¿Os imagináis una pelea entre Robosaurus y Chuck Norris? ¡Madre mía, rápido, necesito un teléfono!… Bien, ya está todo gestionado ¿Por dónde íbamos? Ah sí, Estados Uni… estooo, “la tierra del Robosaurus” es el hogar del Robosaurus (lógicamente). Esta increíble criatura se deja ver por rodeos en los que acecha a su presa: coches que están para el desguace pero que antes de ser transformados en un cubo recibirán una llamarada final del gran Robosaurus.

Así que si te encuentras de viaje por “la tierra del Robosaurus” o planeas pasarte por allí ¡Cuidado! Pese a que aún no se tienen noticias de que haya atacado a ningún humano, el Robosaurus puede conquistar tu corazón por el módico precio de lo que cuesta una entrada para su show ¿pero acaso podemos poner precio a un prodigio como éste? Es una pregunta retórica, no hace falta que conteste nadie. El espectáculo del Robosaurus tiene una ruta itinerante por su país natal, así que si estás por allí y hueles a queroseno de repente puede que tengas la suerte de toparte con él… y si no tienes la suerte de toparte con él aquí está la web del Robosaurus donde hay una programación.

Robosaurus, todo un bicharraco

El Robosaurio mide 12 metros de alto y pesa más de 27 toneladas. Para mover a este mastodonte hacen falta 506 CV de potencia. Casi nada. El padre creador del Robosaurus ideó a este coloso en 1989 inspirado en la mítica serie Transformers, y se llama Doug Malewicki ¡salve al inventor de semejante depredador!, y la empresa que se encarga de gestionar sus espectáculos es Monster Robots, Inc. En recientes conversaciones con Robosaurus hemos sabido que esta bestia suspira por la libertad, ¡pero el curro es el curro, Robo! La construcción del Robosaurus costó 2,2 millones de dólares, pero cuando uno ve el espectáculo piensa que están bien pagados. Un depósito de propano de 75 litros hace que el Robosaurus pueda escupir fuego para asar a sus víctimas (es un exquisito, no se come cualquier cosa). Rechaza imitaciones, por muchos Megasaurus, Transaurus o Transzillas que haya por ahí, el original es el Robosaurus, y es que esta bestia mecánica es tan querida por todos que hasta tuvo un cameo bajo el nombre de Camionosaurio estelar en las primeras temporadas de Los Simpsons. ¡Multiplícate por cero!

Parece que el Robosaurus está pensando en el futuro de los suyos y quiere hacerse un seguro de vida… que en este caso debe ser un seguro de coche. Para ello nuestro gran amigo no ha dudado en ponerse en contacto con Balumba, pero el gigante de hierro no sabe por qué cobertura decantarse ¿Y vosotros, qué seguro le haríais al Robosaurus? Un seguro a terceros ampliado no parece una buena idea, más que nada porque este dinosauro metálico no tiene lunas y parece que está hecho a prueba de fuego ¡aunque luego nunca se sabe! En vuestras manos dejamos la decisión.