En Balumba buscamos maximizar la seguridad de los conductores y, por tanto, minimizar los riesgos de accidentes. El aquaplanning es una de las causas habituales de accidente, provocando numerosos partes en las compañías de seguros de coche en época de lluvias. Para combatir un riesgo, lo primero que hay que hacer es entenderlo.

Qué es el Aquaplanning

El aquaplanning se da cuando el pavimento tiene una capa de agua gruesa, sin llegar a ser considerado charco, y los neumáticos no son capaces de expulsar por sus ranuras todo el líquido elemento necesario. En esta situación, los neumáticos pierden el contacto con el suelo y provocan la pérdida del control del coche.

Para que no se llegue a sufrir el aquaplanning hay que mantener una velocidad acorde a las condiciones climatológicas adversas y mantener en buen estado los neumáticos, cuidando su correcta presión. Sin embargo, también hay algunos consejos que vamos a compartir para intentar que las consecuencias de sufrir un aquaplanning no sean tan graves:

-Si es inevitable entrar en la capa de agua es mejor realizarlo de lleno con las cuatro ruedas, siendo peligroso hacerlo con sólo dos laterales pues tendremos un derrape asegurado y peligroso.

-Aunque sea un tópico y en el momento de tensión es difícil de ejecutar, la primera tarea es la de mantener la calma.

-Hay que intentar mantener el volante recto, evitando que el coche y las ruedas puedan girar aun sin contacto con el asfalto.

-Hay que ser conscientes de que una vez que el coche retome el contacto con el asfalto debe seguir con la misma velocidad y la misma trayectoria que antes de sufrir el aquaplanning.

-Tampoco hay que frenar ni usar el freno de mano, ya que al bloquear las ruedas los neumáticos dejarían de expulsar el agua (aunque antes esta evacuación fuera mínima), provocando así un derrape aún mayor.

Esperamos que recuerdes estos consejos para combatir el aquaplanning. ¿Tienes alguno más? ¡Coméntalo!